actividades para 3º2º y 4º3º LARTyC , MÚSICA‏

EL RITMO Prof. Héctor Berardi

Consideramos al ritmo como el estudio de las relaciones de intensidad y duración de los sonidos.
Para que una obra musical tenga “fluidez”, el ritmo se establece como secuencias que al repetirse en el tiempo producen una sensación agradable. Estas secuencias rítmicas dan al cerebro la sensación de estar sobre un “territorio conocido”, o como plantean varios psicólogos “la sensación de la vuelta a casa”.
El cerebro humano tiene una virtud que no esta presente en ninguna especie animal: la sincronicidad, es decir, la capacidad de escuchar un ritmo e imitarlo. Podemos movernos, bailar, tocar un instrumento o cantar a la misma velocidad de aquella obra musical que estemos escuchando.
Cuando vemos a un niño de un uno o dos años escuchar música, notamos un movimiento casi natural de su cuerpo al ritmo de la música. Esto nos da la pauta que hay un nivel de percepción del ritmo. Es decir podemos ir estudiando los distintos grados de complejidad de un ritmo.
Pulso: es una división del tiempo de la obra musical en latidos regulares, constantes y arbitrarios(es decir que nos da una medida de tiempo pero no siempre esta interpretado por algún instrumento en la obra).

El pulso, tiempo o tempo, será entonces la unidad de tiempo con la que mediremos, en primera instancia, la duración de las figuras rítmicas.

El compás, también es una medida de tiempo pero esta constituida por un pulso fuerte o acento, más una cantidad de pulsos.
Ejemplos de compases :
2 : cantidad de figuras ; 3 ; 4
2 : figura: blanca 4 : figura: negra 8 : figura: corchea

Es decir : 2/2 compás integrados por 2 blancas; 3/4 compás integrado por 3 negras;
4/8 compás integrado por 4 corcheas.

LECTURA RÍTMICA:

Un método sencillo para realizar lecturas rítmicas es reemplazar la cantidad de sonidos de un grupo rítmico por palabras con la misma cantidad de sílabas y darle a esta palabra la duración que requiere cada sonido de ese grupo.
Este sistema es una adaptación al método de estudio del compositor Carl Orff.
Es importante recordar que el uso de estas “palabras claves” es sólo para recordar la duración e intensidad de los grupos rítmicos y que sólo es una regla mnemotécnica; es decir, se sugiere que una vez familiarizado con el ritmo nos despeguemos de esa palabra y lo expresemos con “ta-ka-ta”, “ta-ta-ta”, “ti-qui-ti” o la expresión que más nos ayude y así poder llevarlo a la interpretación corporal o a través de algún instrumento.
Actividades:
1- Marcar un pulso moderado.
2- Tomar dos compases e interpretarlos con las “palabras claves”, respetando la intensidad y duración correctas ( tener en cuenta los silencios indicados).
3- Repetir la interpretación con “palabras claves”.
4- Volver a interpretar con palmas, es decir un golpe por sonido con la duración que indiquen las figuras.
5- Repetir la lectura con palmas y pasar a los dos compases siguientes.